Primero
fue Londres con Match point, y funcionó. Incluso pudo hacerse el remolón por
los paisajes británicos y aprovechar para rodar algunas cosillas más. Luego fue
Barcelona con Vicky, Cristina, Barcelona, y funcionó. Más tarde París, con Midnight
in Paris, y funcionó. Ahora Roma, con To Rome with love y…, lo siento pero se
quedó usted corto Mr. Allen. No queremos decir con esto que sea una mala
película ni mucho menos pero, acostumbrados como nos tenía, fuimos al estreno
ilusionados y salimos decepcionados. Y es que a lo bueno se acostumbra uno
demasiado rápido.
La
película cuenta cuatro historias que nada tienen que ver entre sí pero que
están fragmentadas e intercaladas en el montaje. La razón aún nos la estamos
preguntando ya que en ningún momento se cruzan y, lo que es peor, no se
desarrollan paralelamente en el tiempo ya que mientras una transcurre en el
espacio de tiempo de un día en otras pasan días o a lo mejor semanas, con lo
que no se justifica el montaje de ninguna manera.
Dejando
aparte este detalle, hemos de comenzar señalando que esta película es cómica,
demasiado cómica, lo cual no permite que asomen la cabeza los esbozos de la
poca historia dramática que podría adivinarse entre las líneas del guión.
Además, los recursos de los que se vale el director resultan ser una mezcla
bastante heterogénea de la que resulta un mestizaje estilístico difícil de
justificar. Y quizá la razón sea que hay demasiada dispersión. Nada de lo que
podría generar una buena escena es aprovechado lo suficiente debido al
intercalado continuo de las historias y a la brevedad de las mismas, lo que no
permite desarrollar personajes lo suficiente ni dotar de suficiente coherencia
argumental al guión. En muchas películas de Allen el guión por sí solo salva la
película e incluso la convierte en genial, pero en este caso también se queda a
medio camino.
De
las cuatro historias, dos están cortadas por el patrón italiano, una
protagonizada por Penélope Cruz, donde la historia, que partía de una buena
idea argumental, acaba siendo metida con calzador y donde las interpretaciones
son flojitas, y otra protagonizada por Roberto Benigni que en sí es la que,
para la extensión de que disponía, tiene una mejor factura final, muy bien
interpretada y recreada, donde lo que se quería contar está completo y
suficiente y donde no parece faltar ni sobrar nada, destacando la genial interpretación
de Benigni, digna del mismísimo Alberto Sordi, como decimos con un tono muy
italiano.
Las
otras dos tienen planteamientos mucho más del estilo al que Allen nos tiene
acostumbrados, si bien una de ellas, la que interpreta el propio Allen, se
regodea en lo cómico hasta dejarla sin sustancia. La otra es la que, a nuestro
parecer, podría haber dado como resultado la película que estábamos esperando,
con los típicos conflictos de parejas, trios, dobles parejas, que tanta confusión
y diálogo interno generan en los personajes y que habría dado lugar a líneas y
líneas de diálogo inteligente que tan bien sabe combinar Allen, y donde el
psicoanálisis de 90 minutos, que este director cocina de maravilla, habría
tenido campo abierto. Incluso respetando las intervenciones de un Alec Baldwin
con reminiscencias de aquel Bogart de Sueños de seductor. Pero, como decimos,
sufre de una falta de un desarrollo completo y, lo que es clave, no acabamos de creernos
al personaje de Jesse Eisenberg, no acabamos de encontrar ni un gramo de
química entre él y el personaje de Ellen Page, y echamos de menos algunos
momentos más que justifiquen al personaje de Greta Gerwig. Hace falta dejar que
los personajes vivan; los clichés de situaciones que, como espectadores, ya
conocemos,no justifican por sí solos el comportamiento de los personajes.
En
definitiva, esta película está casi bien en todos los aspectos y no acaba de
estar bien en ninguno, te quedas con la sensación de que le falto un poquito,
la mires por donde la mires, para ser lo que pretendía. O quizá es que nos ha
convertido usted en espectadores exigentes Mr. Allen y ahora queremos algo más
de una película.
Tíulo original: To Rome with love
Director: Woody Allen
Actores: Woody Allen, Judy Davis, Allison Pill, Flavio Parenti, Fabio Armiliato, Roberto Benigni, Jesse Eisenberg, Ellen Page, Greta Gerwig, Alec Baldwin, Penélope Cruz, Alessandro Tiberi, Alessandra Mastronardi.
Año: 2012
“Blancanieves”,
dirigida por Pablo Berger (Torremolinos 73), será finalmente la película que
representará a España en la lucha por los oscars en la categoría de mejor
película de habla no inglesa. Se impuso en la votación final a El artista y la
modelo, de Fernando Trueba, y a Grupo 7, de Alberto Rodríguez.
La cinta está protagonizada
por Maribel Verdú y Macarena García y, aunque no hemos tenido ocasión de verla
todavía puesto que no se ha estrenado aún, parece que es una versión muy libre
del cuento de los hermanos Grimm con ciertos toques hispanos, tanto en imágenes
como en sonido. Parece que este cuento está muy de moda últimamente en el
celuloide (Mirror, mirror; Blancanieves y la leyenda del cazador,…) y a lo
mejor está muy sobrecargado el cupo de cuentología de la academia de Hollywood,
pero esto es lo que hay. Así que desde aquí le deseamos la mejor de las suertes
y esperamos, al menos, que llegue a la selección final y permita a sus
protagonistas promocionar nuestro cine por la alfombra roja.
