A punto de cumplir la edad de 81 años, Jean Simmons murió ayer en Santa Mónica, California (USA). La actriz londinense, aquejada de un cáncer de pulmón, espléndida en títulos como Espartaco (Stanley Kubrick), La túnica sagrada (Henry Koster), Sinuhé el egipcio (Michel Curtiz), Horizontes de grandeza (William Wyler), Cara de ángel (Otto Preminger) o Página en blanco (Stanley Donen), contaba con dos nominaciones al oscar.
La primera vez fue nominada con apenas 20 años por su interpretación en la versión de Hamlet dirigida por Laurence Olivier en 1948. La película obtuvo cuatro oscars de los siete a los que optaba, entre ellos el de mejor película y mejor actor para el propio Laurence Olivier, pero la joven Jean vio como Claire Trevor se lo arrebataba por su interpretación en Cayo Largo (John Huston) donde curiosamente fue la única nominación frente a sus compañeros de reparto Humphrey Bogart, Lauren Bacall o Edward G. Robinson cuyos nombres no fueron incluidos en la quiniela de nominados.
Tendría que esperar más de veinte años para volver a ser nominada por Con los ojos cerrados, dirigida por su marido en aquel momento, Richard Brooks (antes había estado casada con el también actor Stewart Granger), pero en esta ocasión, a pesar de las actrices de peso nominadas (Geneviève Bujold, Jane Fonda, Liza Minelli y la propia Jean Simmons), el oscar se lo llevó Maggie Smith por su interpretación en Los mejores años de Miss Brodie, obra menor del británico Ronald Neame, director de títulos como Odessa o El millonario.
Sin duda será recordada no sólo por sus interpretaciones sino también por su belleza, perfecta para películas de época, una de las mujeres más hermosas con una túnica, sin duda. Asimismo, en España también quedará en la mente de todos por su aparición televisiva en la serie El pájaro espino, de gran popularidad en los años ochenta en nuestro, por aquel entonces, país monocanal, junto a otros grandes como Richard Chamberlain, Barbara Stanwyck y Christopher Plummer, que fue merecedora de un premio Emmy.
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